Imaginamos, entre todos, una vivienda en la que nos gustara vivir, luminosa y exhibicionista para quedar con los amigos, decían unos, íntima y en penumbra, los más remolones. Una vivienda con múltiple personalidad y consciente de los cambios de estación. Una vivienda que nos permite abrirnos a dos hábitat diferentes el de la calle, enmarcada en un nuevo desarrollo urbano pero cerca de la vida de villa de Vallecas, y el del patio de manzana acotado y seguro.
Consecuencia de estas premisas es una vivienda pasante con un espacio para la intimidad y otro para la vida social, un espacio estático y otro cambiante: el de relación, que permite que se convierta en un espacio al aire libre cuando el tiempo lo permite o cerrado cuando hace frío. De este modo no perdemos metros cuadrados en invierno y disfrutamos en verano de una terraza de las dimensiones de un salón.
3d
El “cuartillo” de manzana se fragmenta y desliza multiplicando las fachadas y desdibujando la imagen que el planeamiento tenía para ese solar. La calle está más presente dentro del patio y el edificio ajusta la escala al caserío.
FOTOS DE OBRA
Noviembre de 2008
Junio de 2008